Hay que romper la baraja

Tras la avalancha de actos y discursos independentistas, con la quema de retratos reales como buque insignia, llegó vídeo de Rajoy llamando a celebrar el día de la Fiesta Nacional con orgullo y que tanta polvareda ha levantado. A mí me parecen las distintas caras de una misma moneda. Unos, los nacionalistas, utilizan el tema como vehículo para conseguir sus objetivos: ganar votos que los mantengan en el poder. Otros, PP, utilizan el tema para conseguir sus objetivos: ganar votos que les coloquen en el poder. Unos terceros, PSOE, utilizan el tema para conseguir sus objetivos: ganar votos que les mantengan en el poder.
Todos van a lo suyo: pisar moqueta y disfrutar del coche oficial. En el fondo están convencidos de que no se llegará muy lejos y nadie romperá la baraja. Es muy posible que se equivoquen porque juegan con los sentimientos de la gente y cuando hablan las tripas no siempre impera el sentido común.
Desde mi punto de vista creo que se hace necesario algo que cambie la situación. Ibarreche anuncia su referéndum (¿para qué exactamente?) de aquí a un año, Carod Rovira sitúa el suyo en el 2014. Pues bien yo realizaría ambos referendums de aquí a un mes y con una pregunta muy clara: Independencia total y absoluta ¿sí o no?, sin medias tintas, sin estados asociados, sin relaciones preferentes, sin procesos continuados hacia, sin regímenes asimétricos, ... SIN PAMPLINAS.
Si en el País Vasco y/o Cataluña sale victorioso el SÍ tendrían seis meses para concretar su independencia y declararse estados soberanos, comenzar los trámites para solicitar su ingreso en la ONU, la Unión Europea, la UEFA y donde les de la gana. Serán tan independientes como España, Albania o Francia, con todo lo que eso tiene de bueno y de malo. No se puede obligar a nadie a sentirse español si ese no es su deseo. Cada ciudadano debe ser libre para sentirse parte de una nación y expresarlo libremente. Y asumir las responsabilidades que de ello se derivan.
Si en el País Vasco y/o Cataluña sale victorioso el NO se habrá demostrado que una mayoría de vascos y/o catalanes se sienten españoles, quieren seguir siendo parte de España, con lo que eso tiene de bueno y de malo. En igualdad de condiciones que cualquier ciudadano de cualquier punto de España, con los mismos derechos y los mismos deberes, como ciudadanos de un mismo país. Libres e iguales. Sin preferencias territoriales ni leyes proteccionistas de ningún tipo. Una nación de ciudadanos, vivan donde vivan, hablen como hablen.
Los nacionalistas son minoría no solo a nivel de toda España sino incluso en País Vasco y Cataluña. Hay que quitarles la iniciativa, hay que dejar de temerles, hay que dejar de ir siempre a remolque de sus ocurrencias .... hay que romper la baraja y cambiar de juego. Sin miedos. Es la hora del Todo o Nada.