El presidente de la España de Torrente

Dos buenas visiones del iluminado de la Moncloa:

El Rehén
Gabriel Albiac (La Razón)

"El sábado la obra tenía un solo espectador: Zapatero. Y un mensaje: tu destino es el que nosotros decidamos

El rehén sabe lo que el mensaje dice. A él solo va dirigido. A él, que, antes y con más trascendencia que Presidente, es rehén cuyo destino se decide en las medidas apuestas de ETA.

Y es eso lo primero que él sabe. Que la retórica manda hablar de acciones locas, o de atentados sin ton ni son. No. Salvo excepción menor, las matanzas de ETA han reposado siempre sobre cálculos tácticos y estratégicos muy sopesados. ETA es un asesino frío; gélido, a veces; las más. Tratar de estúpido o loco al enemigo, cuando el enemigo va ganándote la batalla, es la peor necedad de quien debe dirigir el combate, desde lejos, con la paciencia matemática del ajedrecista. Tratar de estúpido o loco al enemigo que va ganándote la guerra, es ser ya de la estofa de los cadáveres.

El atentado del sábado concentró una altísima capacidad de fuego; una de la más -si no la más- devastadora de los últimos quince años. Fue una operación logísticamente impecable: con utilización de apenas seis terroristas en su conjunto, y puede que uno solo en la ejecución final. Fue seleccionado, como objetivo, el más claro emblema arquitectónico del Madrid cosmopolita: ese prodigio de economía plástica que es la geométrica Terminal 4 de Barajas. El índice de destrucción planificado se cumplió con precisión de virtuoso. El amasijo de hierro y cemento en que quedó el parking canta las excelencias épicas del nacionalismo vasco tanto cuanto las retorcidas bases tronchadas del World Trade Center cantaran las del dios islámico. Religiones de destrucción ambas, ningún monumento dice mejor su verdad que ese vacío.

Pero terrorismo no es violencia. No sólo. Es necesariamente violencia ejemplar. La dimensión escénica y el tratamiento simbólico diferencian sus operaciones de las de cualquier otra forma de guerra. Las Torres Gemelas no serían un objetivo teológico sin su emplazamiento, sí, en el corazón del mundo civilizado; tampoco lo hubieran sido sin la instantánea resonancia universal del altavoz mediático que trueca el acontecimiento en proclama ante la especie humana entera. A la escala que le es propia, cada acto de esa religión del hombre nuevo -esto es, del exterminio del que existe- que es el terrorismo, exige esta necesaria confrontación con lo absoluto. ETA eligió, sin embargo, -y lo eligió con cuidado exquisito- el día de menor cobertura mediática del año, para el que puede ser el acto de terror simbólico más importante de su historia: uno de los solos tres días sin prensa; aquel en que las redacciones de radios y televisiones andan más deshabitadas; el día, sobre todo, en que alcohol y familia dejan más fuera de juego la atención pública de un ciudadano bien encastillado en su madriguera.

Hay paradoja. Si confundimos el espectáculo. La del sábado no era función abierta. Era un pase privado. Con único espectador: ese al cual otros llaman Presidente, y al cual ETA sabe inerme rehén suyo. Cuando acabó la función nadie tuvo siquiera que aclararle: esto mismo -o un poquito más- podemos hacer en víspera de elecciones. Reflexiona.

Reflexionó. Habló. Dijo lo que dijo. El rehén sabe que es rehén. Que no puede ya no serlo.

Control antidoping
Fray Josepho (Libertad Digital)

¿De qué droga, de qué producto hipnótico,
de qué medicamento relajante,
de qué principio activo aletargante
o de qué filtro mágico y exótico?

¿De qué medicación, de qué narcótico,
de qué nuevo específico dopante,
de qué poción balsámica y sedante
o efecto secundario de antibiótico?

¿De qué fenomenal farmacopea?
¿De qué brebaje, píldora o gragea?
¿De qué sustancia o qué estupefaciente?

¿De qué alcaloide estás bajo el efecto?
¿De qué se te ha nublado el intelecto?
¿Qué coño te has fumado, presidente?

No se si Zapatero será rehén de ETA o no. Lo que si que creo es que Zapatero ha intentado utilizar a ETA en sus maniobras politiqueras. Y parece que ETA no está por la labor de servir de cohartada para este tipo y se lo ha hecho saber.

No olvidemos que el iluminado de la Moncloa no ha trabajado en su vida (tiene un año menos que yo y en mis espaldas llevo 24 años en la enseñanza y otros dos anteriores haciendo de todo un poco). Además tampoco ha tenido nunca un cargo de responsabilidad real (ni siquiera ha sido concejal de un pueblecito).

Por lo tanto toda su experiencia vital se reduce al PARTIDO, a dar codazos, trapichear, engañar, manipular, pisotear, ... LO QUE SEA para ir subiendo por el escalafón de los grises, para ser un perfecto aparatchik que siempre esté donde obtenga beneficios de su gran virtud: no hacer nada útil, nada productivo, "vivir del cuento".

Y posiblemente con sus limitaditas neuronas pensó que podría manejar a ETA a su conveniencia: ahora te doy pero digo que no, ahora te quito mientras aparento que te doy, ahora te "la pego" con el vecino, .... en fin lo que ha hecho con Carod, con Bono, con Maragall, con Más, y a lo largo de toda su trayectoria de "trepa".

Así que desde ETA han querido dejarle las cosas claras. Le han dicho aquello de "usted no sabe con quien está hablando", si quiere "jugar" con nosotros será con nuestras reglas. Reglas que, gusten o no, son muy claras.